La toxicidad en las relaciones

«Entre el dolor y el amor; el tamaño sí importa.«

A lo largo de los años, la humanidad ha adquirido una importante y curiosa forma de comunicar y expresar lo que siente a comparación de otros seres vivos. Y una forma de llevar a cabo esto, es por medio de la interacción con otras personas. El amor, la paciencia, la bondad, la amistad y el cariño son algunas de las formas que se llevan a cabo para esta interacción. Pero también puede haber ciertas expresiones no tan gratas en la comunicación, como el rencor, el enojo, la ira, los celos y la envidia. Parte de nuestra experiencia como humanos y en esta interacción los unos con los otros, son las relaciones de pareja.        

Las relaciones de pareja son una compleja interacción de emociones, necesidades y expectativas, en donde en la mayoría de los casos, solemos idealizar a la persona que amamos a tal grado de dejarla de ver como lo que es, una persona. Comenzamos a verla a través de un filtro positivo exagerado, enfocándonos en sus cualidades positivas y minimizando o ignorando sus defectos o imperfecciones.

Desde el primer momento en que dos personas se unen comienzan un viaje de descubrimiento mutuo, afecto y compromiso. Sin embargo, este viaje también puede estar plagado de desafíos y conflictos. En la actualidad, las relaciones de pareja han ido evolucionando con el tiempo, influenciadas por cambios culturales, sociales y tecnológicos. En este mismo hilo, la comprensión de lo que constituye una relación saludable y satisfactoria ha adquirido una importancia cada vez mayor.

«El amor sólo es posible cuando aceptamos nuestra ineludible soledad; no es el encuentro de dos incompletos, es el encuentro entre dos completos. Amar no se da en la fusión (la cual asusta, pues nos quita la autonomía); tampoco está en la separación (pues nos quita el apego). Está en la posibilidad de ser uno y luego decidir si se quiere o no compartir la vida con la persona que nos atrae…cada persona debe ser una unidad (Gikovate, 1996).

Complicaciones en las relaciones

Para comenzar a hablar sobre las complicaciones en las relaciones, vamos a navegar un poco al comienzo de nuestro primer encuentro con el amor, nuestras figuras parentales. La relación con nuestros padres es la primera relación importante de nuestra vida y, en principio, nuestra gran historia de amor verdadero, aunque no siempre es una historia de amor (Congost, 2017). ¿Alguna vez se han preguntado cómo afectan nuestras primeras figuras de apego con lo que son actualmente nuestras relaciones? Estas son algunas de los modelos que se presentan en la enseñanza de la infancia y cómo afectan en el desarrollo en la adultez:

Como bien se puede observar, la forma en la que recibimos la enseñanza de nuestra primera figura de amor es la manera en la que demostramos nuestro amor a las demás personas alrededor. Ponernos a pensar y analizar el por qué llegamos a demostrar nuestro amor de una forma diferente nos ayuda a centrar qué es lo que podemos mejorar y lo que queremos demostrar a nuestra pareja. La mayoría de las relaciones tóxicas comienzan principalmente por la enseñanza que recibimos de infantes en el significado del amor.

         Sin embargo, aunque no fue nuestra responsabilidad el haber aprendido una forma errónea lo que es amar, si es nuestra responsabilidad el cambiar este aprendizaje y demostrar lo que es el verdadero amor para poder evitar o que se sigan permaneciendo las relaciones tóxicas.

¿Qué es amar a tu pareja?

Amar a tu pareja implica experimentar una conexión profunda, afectiva y comprometida con esa persona. Significa sentir un profundo afecto, respeto, admiración y cuidado hacia ella. Aquí hay algunos aspectos clave que pueden definir lo que significa amar a tu pareja:

·         Aceptación: Amar a tu pareja representa aceptarla como es, con sus virtudes y defectos, apoyando sus proyectos y su individualidad.

·         Respeto y confianza: Significa respetar los límites, las opiniones y las decisiones de tu pareja, así como confiar en ella y sentirte seguro en su presencia.

·         Comunicación abierta y honesta: Amar a tu pareja significa ser capaz de expresar tus pensamientos, sentimientos y preocupaciones de manera abierta y honesta, y estar dispuesto a escuchar y comprender los de ella.

Para reflexionar; ¿En qué tamaño estás dispuesto a amar a tu pareja?

Bibliografía

         Barrios, A., & Pinto, B. (2008). El concepto de amor en la pareja. Ajayu Órgano de Difusión Científica del Departamento de Psicología UCBSP, 6(2), 21-41.         Congost, S. (2017). si duele, no es amor. LID Editorial Empresarial. España. https://www. google. com. gt/search.

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